¿Prescindible o imprescindible? El tónico es el eterno protagonista de este debate sobre el cuidado de la piel. Si bien el mercado ha inundado esta categoría con fórmulas demasiado alcohólicas y aguas aromatizadas que no harán más que resecar tu rostro, de vez en cuando podemos encontrar tesoros como The Jasmin Garden. 

"¿Qué es para ti?", le preguntamos a May Lindstrom. "No creía que una bruma pudiera tener tanto impacto en la piel. Pero de repente cambió", responde. The Jasmine Garden es como despertar con besos dulces, florales y plateados. En seguida sientes como la piel se enfría y se calma. Es como una mini meditación.

BE WATER MY FRIEND

El agua es un elemento imprescindible del régimen de belleza, especialmente si cuidas tu piel con aceites. Para que tu piel absorba todos sus nutrientes —los hay que vehiculizan mucho mejor con agua, solubles en agua; y los hay con más afinidad lipídica, es decir, solubles en aceite— es importante incluir ambos elementos en tu régimen de cuidado de la piel. Y The Jasmine Garden transforma tu piel en una esponja que todo lo absorbe y retiene.

INGREDIENTES CLAVE

Tras dos años de desarrollo y después de probar infinidad de ingredientes de todos los rincones del planeta, por fin, dio con la fórmula perfecta. ¿Si tuviéramos que poner una pega? El frasco de cristal violeta —que se encarga de mantener todos los nutrientes a salvo— no deja ver la preciosidad que hay dentro. Normalmente las brumas son transparentes, esta es dorada por su riqueza en aguas celulares y la resina de cacao fresca. Piel sensible, con acné, madura, irritada, enrojecida, inflamada, desvitalizada. The Jasmine Garden te ayudará en todo por un millón de razones, pero estas son las 5 más importantes.

• Plata coloidal. Es ideal para tratar traumas en la piel. Es increíble como sana el tejido, por ello es tan beneficiosa para pieles con acné, psoriasis, eczema, dermatitis o cualquier inflamación. Heridas, marcas o los efectos en la piel de tratamientos médicos severos. Sus efectos calmantes y refrescantes se sienten al instante.

• Jazmín, el de verdad. No tiene nada que ver con esas fragancias empalagosas, sintéticas y demasiado maduras que muchas veces se asocian con el jazmín. Esta exótica flor solo se recolecta cuando anochece y sus beneficios trascienden hasta el cerebro. Su aroma estimula la liberación de serotonina, considerada la hormona de la felicidad. ¿Y qué beneficios tiene en la piel? Es ideal para pieles secas y deshidratadas.; tiene una capacidad asombrosa para reparar el tejido, para estimular la regeneración celular y llevar la elasticidad de la piel al siguiente nivel. 

• Hidrosol de rosas. Nada más y nada menos de que rosas búlgaras orgánicas. Rebosante de compuestos activos, en concreto 300, muchos más que el agua de rosas. En este caso se obtiene el agua del interior de la rosa fresca, no se trata de una infusión ni de un subproducto, sino de agua celular. Un sinfín de vitaminas, minerales, antioxidantes con propiedades antiinflamatorias, hidratantes y tonificantes extraordinarias. Además de una fragancia de ensueño es el aliado ideal para envejecer elegantemente. 

• Cacao. La industria del cacao mueve alrededor de 70.000 millones de dólares al año y no solo está plagada de trampas —diluciones, adulteraciones, lagunas en el etiquetado— también de abusos sociales y ambientales. En May Lindstrom colaboran con proveedores locales que cumplen todos los requisitos de Comercio Justo y que ofrecen un cacao excepcionalmente alto en antioxidantes, capaz de bloquear los radicales libres y evitar tanto la degradación de colágeno como de elastina. Rico en omega 6 y enzimas crudas, promueve el rejuvenecimiento celular; aumenta el flujo sanguíneo y reduce el enrojecimiento.

• Vainilla. Menos del 1% de la vainilla que se utilizan —ya sea en cocina, perfumería o cosmética— es de verdad. El 99% restante es sintética y no contiene los nutrientes y ácidos grasos que convierten a la vainilla en el ingrediente tan maravilloso que es. Con existencias extremadamente limitadas y obtenida de forma ética en Madagascar, The Jasmine Garden devuelve a la vainilla al lugar que se merece.

MEZCLAS

Sola o acompañada. The Jasmine Garden es igual de increíble. Llévala en el bolso, guárdala en tu escritorio o en tu mesita de noche, tenla siempre a mano para hidratar, calmar y proteger tu piel siempre que lo necesite. O haz que todos tus tratamientos se conviertan en todavía mejores combinándolos así: 

The Blue Cocoon + The Jasmine Garden

Para los días en que tu piel esté sensible o simplemente tengas prisa. “La mitad de las mañanas de la semana, lavo mi cara con agua y, sobre la piel mojada, masajeo rápidamente The Blue Cocoon y termino vaporizando The Jasmine Garden”, nos asegura Lindstrom. Esta combinación garantiza el aporte de vitaminas y nutrientes que tu piel necesita para pasar el día en perfectas condiciones. 

The Blue Cocoon + The Youth Dew + The Jasmine Garden

Esta combinación hará cantar a tu piel. Además de regenerar el tejido, hidratar y calmar la inflamación de tu piel, The Jasmin Garden hará que todos los componentes rejuvenecedores de The Blue Cocoon y de The Youth Dew —entre ellos la Coenzima Q10— lleguen hasta lo más profundo de la piel y den lo mejor de sí.

The Honey Mud + The Jasmine Garden 

Los días que utilices este delicioso barro como mascarilla –también es ideal como limpiadora de uso diario– refréscala con The Jasmine Garden. En seguido se volverá una leche sedosa, manejable y calmante, ideal para reactivar la fórmula y ayudar a retirar las impurezas de la piel. 

The Clean Dirt o The Problem Solver + The Jasmine Garden

¿Puede utilizarse The Jasmin Garden como elemento acuoso para activar The Clean Dirt o The Problem Solver? La respuesta es un (súper) sí. ¡Más poder para tu piel! Los días en que tú o tu piel necesitéis un extra, desenrosca The Jasmine Garden y mézclalo con alguno de los polvos mágicos de May Lindstrom. Recuerda que debes mezclar una cucharada de The Clean Dirt o The Problem Solver con la misma cantidad de la bruma.

BONUS TRACK 

Después de un día sol o durante un caluroso día de verano, los cubitos de The Jasmine Garden son el antídoto. Coge un molde para cubitos de hielo, desenrosca el frasco de la bruma, llena uno de los compartimentos y guárdalo en el congelador. En unas horas podrás deslizar por tu rostro un cubito calmante, antiinflamatorio, regenerador y de lo más hidratante. Dibuja un infinito bordeando tus ojos, resigue toda el rostro, pasa por el cuello… Mmm… Te hará poner los pies en la tierra. Si no terminas todo el hielo, vuelve a guardarlo en el congelador para otro momento. 

*Debido a la baja temperatura es mejor no hacerlo en pieles muy sensibles.