Estos perfumes no nacen de tendencias. Nacen de siglos de oficio y de un savoir faire transmitido de padre a hijo desde 1760. De la rosa búlgara al vetiver de Haití, cada ingrediente es elegido con la misma exigencia con la que Creed conquistó a reyes y emperadores.
Las fragancias Millésime de Creed se elaboran aún hoy de forma artesanal en Francia: materias primas naturales pesadas, mezcladas y maceradas en gran parte a mano. Un proceso lento y preciso que huye de lo industrial para dar forma a perfumes profundos, elegantes, creados para quienes entienden el lujo como autenticidad y excelencia.
Déjate guiar por la estela de Aventus, Green Irish Tweed o Silver Mountain Water y descubre un universo donde la tradición se encuentra con la modernidad. Perfumes con carácter, historia y presencia, destinados a convertirse en una firma personal inconfundible. Palabra de jcApotecari.
